Cortesía de FIFA.COM
El primer registro de una marca de cinco contra cinco fechas organizada de fútbol de 1930 en Montevideo, Uruguay. El mismo año en que la nación pionera del fútbol organizó la primera Copa Mundial de la FIFA en su flamante Estadio Centenario, un entrenador nacido en Argentina llamado Juan Carlos Ceriani, tan cansado de los campos empapados de lluvia y las sesiones de entrenamiento canceladas , trajo el juego en interiores por primera vez.
Con miras a hacer su nuevo juego de interior más accesible, pero también más organizado, elaboró un conjunto de reglas sorprendentemente similares a las que rigen hoy en día el fútbol sala. Los niños de Montevideo tomaron el juego de los pequeños con aplomo, y se jugaba en las casas de la YMCA en toda la capital. La versión híbrida se adaptaba perfectamente a lugares al aire libre o bajo techo, ya que todo lo que se necesitaba era una pequeña cancha de baloncesto.
Orígenes nebulosos
Mientras Ceriani fomentaba el juego de Uruguay, se jugaba un juego similar en las calles de Sao Paolo, Brasil.
El juego se extendió rápidamente por Sudamérica como ' futbol sala' (fútbol sala o fútbol sala) o ' futebol de salao ' en Brasil, donde las primeras ligas locales surgieron como malas hierbas.
Como era de esperar, Brasil adoptó el fútbol hiper-técnico, a veces un híbrido claustrofóbico, mejor que cualquier otro. Hoy en día, muchos de los grandes de Brasil apuntan a una infancia llena de fútbol sala como una de las principales razones de su habilidad. Ronaldinho, Pelé, Zico, Sócrates, Bebeto y muchos otros crecieron jugando al fútbol sala y dan crédito al juego libremente.
Globalizarse
No pasó mucho tiempo para que el juego se extendiera a todos los rincones de América Latina, y la primera competencia internacional de fútbol sala comenzó en 1965. Y en un poco de shock, fue Paraguay el que mejor salió de los bloques, llevándose a casa el primeros honores sudamericanos. Brasil ganó los siguientes seis campeonatos entre 1965 y 1979. Los pioneros vestidos de amarillo del arte del fútbol sala luego continuaron extendiendo su dominio con victorias en los Juegos Panamericanos de 1980 y 1984.
Con un número menor de jugadores, un campo más reducido y un balón lastrado, el fútbol sala exigía la aparición de nuevas estrategias. Los pies rápidos y la mente rápida eran imperativos, al igual que el uso de los dedos y la planta del pie.
La Federación Internacional de Fútbol de Sala (FIFUSA) se fundó oficialmente en Brasil en 1971. Y el primer Campeonato Mundial de Fútbol Sala (aunque aún no está afiliado a la FIFA) tuvo lugar en 1982 en el semillero de fútbol sala de Sao Paolo. Continuando con su dominio sobre el juego, Brasil nuevamente se llevó los honores con un equipo plagado de estrellas del juego al aire libre. Luego continuaron repitiendo su camino ganador en España tres años más tarde en 1985, antes de perder su corona en Australia ante sus rivales Paraguay.
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La FIFA se incorporó en 1989, trayendo el fútbol sala bajo sus auspicios y patrocinando el primer Campeonato Mundial de Fútbol Sala de la FIFA "oficial" en 1989 en Holanda. Con la nueva etiqueta oficial, el nombre del juego se convirtió oficialmente en "fútbol sala". Brasil también volvió a encarrilarse y ganó el título dos veces al trote (Holanda 1989 y Hong Kong 1992)
En 1996, los brasileños volvieron a ganar el título mundial, pero cuatro años después, en 2000, España, la potencia emergente de Europa, trastornó el carrito de manzanas sudamericano en Guatemala.
Actualmente, en la cúspide de desafiar la supremacía a largo plazo de Brasil, España no es el único equipo europeo que encuentra su camino en el mundo del fútbol sala. Rusia, Inglaterra, Italia y Ucrania están emergiendo como excelentes proveedores de fútbol sala por derecho propio.
Con el surgimiento de ligas profesionales en Brasil, Rusia, Portugal, España, Irán y Japón, la vieja suposición de que el fútbol sala es simplemente un medio para desarrollar la creatividad y las habilidades que se utilizarán en el juego al aire libre está comenzando a desvanecerse. El juego reducido está prosperando, por derecho propio, en seis continentes.
Crucial para el desarrollo
El papel del fútbol sala en el fomento de la imaginación y la creatividad para su uso en el juego al aire libre sigue siendo crucial.
"Los jugadores de Brasil son mejores que los estadounidenses en general porque son más sólidos desde el punto de vista técnico", dijo recientemente a FIFA.com Sean Bowers, actual capitán de fútbol sala estadounidense y veterano de España 96. "Nosotros (en los Estados Unidos) somos algunos de los mejores atletas del mundo, pero realmente necesitamos obtener esa ventaja técnica adicional, y aquí es donde entra el fútbol sala".
La superestrella de Brasil y Real Madrid, Ronaldo, apuntó directamente al fútbol sala después de marcar un gol brillante contra Turquía en la semifinal de la Copa Mundial de la FIFA Corea / Japón 2002.
"Nadie esperaba que yo lo hiciera", admitió. "No es fácil lanzar el balón con la punta del dedo del pie, pero fue instintivo, y se lo debo a jugar mucho al fútbol sala cuando era niño".